El doble terremoto que afectó a Siria y Turquía este año y la larga experiencia de Chile como país asociado al riesgo de desastre en esta materia, son puntos de conexión que fueron desarrollados gracias en una visita realizada por una delegación de la prestigiosa casa de estudios al país, oportunidad donde compartieron con la directiva de CITRID.
El lunes seis de febrero de este 2023 será una fecha difícil de olvidar en la región turca de Hatay, una de las más afectadas por los dos terremotos de magnitud 7,7 y 7,6 que sacudieron el sureste de Turquía.
La cifra de personas fallecidas por ambos terremotos es impactante. Medios europeos señalaron que la cantidad de víctimas fatales fue de 51.000, (45,089 en Turquía, el resto en Siria), sin contar los miles de desaparecidos. Millones de personas perdieron sus casas y los damnificados afrontan una reconstrucción que será larga y compleja, debido a la guerra civil en Siria que se arrastra desde 2011.
Se trata de una herida reciente para la población de las zonas afectadas por este desastre, una que representa un desafío para la prestigiosa Social Sciences University of Ankara en Turquía, en materia de resiliencia y desarrollo de una infraestructura que permita prevenir cifras de muertos tan abismantes.
Muestra de aquello fue la visita que una delegación de esa casa de estudios realizó a mediados de este año a Chile, oportunidad en que la comitiva pudo intercambiar ideas y proyectos con la plana directiva del Programa de Reducción de Riesgos de Desastres CITRID de la Universidad de Chile.
“Esperamos que sea el inicio de una colaboración bilateral”, dice Daniela Ejsmentewicz, directora ejecutiva de CITRID, quien destaca la similitud que existe entre Turquía y Chile en materia de riesgo de desastre. “Chile y Turquía tienen muchos temas en común, así que esperamos poder compartir a nivel académico sobre experiencias de fortalecimiento de la resiliencia y mejora de la gobernanza de cada país”.
Colaboración en prevención
Paulina Vergara Saavedra, subdirectora de CITRID, profundizó en los principales puntos que se discutieron en las instancias de intercambio que conformaron esta visita oficial. “Tuvimos oportunidad de hablar mucho sobre cómo ha ido cambiando la institucionalidad frente a una emergencia hacia otros enfoques”, señala destacando que “la importancia de la integración y participación desde lo público y de los cuerpos de personas expertas, tanto en tecnocracia dentro del aparataje estatal como en el ámbito del conocimiento e Investigación son vitales”, apuntó, poniendo énfasis en la creación de un espacio de acción y colaboración entre ambas universidades.
Respecto a esta colaboración bilateral, ya existe un primer hito importante que podría congregar a ambas casas de estudios superiores en 2024. Se trata del «Simposio Internacional de Gestión de Desastres y Asuntos Humanitarios» organizado por la Social Sciences University of Ankara en febrero próximo, una instancia relevante a nivel internacional que implica una discusión y debate sobre los riesgos a los que diversos países se enfrentan, entre ellos Chile. “Hemos sido invitados, pero aún tenemos que concordar la forma de participación”, aclara Daniela Ejsmentewicz respecto a este hito de carácter internacional.